Haciendo político lo privado
En México, aún vivimos los rezagos de la conquista. Somos un pueblo post-colonizado, en donde las mujeres aún no nos hemos emancipado, vivimos aún colonizadas, nuestro cuerpo es un territorio de dominio por parte de los hombres, por parte de la sociedad, la familia, la escuela, la iglesia, el gobierno. ¿Cómo podemos las mujeres adquirir poder? ¿cómo podemos empoderarnos para ser entes políticos, ciudadanas, si hemos sido educadas para pertenecer a las y los hijos, a un marido o compañero, para sostener a la familia a como de lugar, a ser abnegadas, sufridas y entregadas? ¿cuándo las estructuras nos han arraigado al ámbito privado? Precisamente el tema de la despenalización del aborto, nos acerca a un debate de tiempo atrás. En México se tutela la vida desde el momento de la concepción. Como siempre, es más importante el producto que la madre. Las legislaciones al respecto no tendría que tutelar únicamente el derecho a vivir que no está en discusión. La legislación tendría que contemplar un tiempo real para que las mujeres en caso de considerarlo necesario, se puedan practicar un aborto. Pero no, el Estado, las y los legisladores (en México sólo el 30% de los integrantes de la Cámara de Diputados son mujeres) son quienes deciden penalizar el aborto y con ello condenan a las mujeres a seguir sujetas de un régimen patriarcal. Nuestro cuerpo sigue colonizado, ya que no podemos elegir, qué hacer o que no hacer. El debate de que no debe ser una medida de anticoncepción es muy retrogrado, porque no siempre son efectivos los medios de anticoncepción y es una realidad. En México no todas las mujeres tienen acceso a ellos, no todas las mujeres tienen acceso a cursos de sexualidad, a programas de salud sexual y reproductiva. ¿Cómo vamos entonces las mujeres a tomar la vida pública si nuestra salud reproductiva, si nuestra sexualidad sigue siendo un tabú, si nuestro primer territorio que es nuestro cuerpo, aún no es libre y aún no lo gobernamos? Campañas como las que se han implementado en la región de América Latina sobre la despenalización del aborto 28 de septiembre, hacen visible la inquietud de muchas mujeres sobre el tema de ahí la importancia de estas manifestaciones, ya que están formando ciudadanía, las mujeres opinan y externan su sentir y eso ya es sacar a lo público lo que hemos tenido como privado.
¿Ustedes que opinan?
Soy Enma Obrador de la ASOCIACIÓN INTERNACIONAL DE MUJERES ABRAZANDO MÉXICO AMAM A.C.
271
En México, aún vivimos los rezagos de la conquista. Somos un pueblo post-colonizado, en donde las mujeres aún no nos hemos emancipado, vivimos aún colonizadas, nuestro cuerpo es un territorio de dominio por parte de los hombres, por parte de la sociedad, la familia, la escuela, la iglesia, el gobierno. ¿Cómo podemos las mujeres adquirir poder? ¿cómo podemos empoderarnos para ser entes políticos, ciudadanas, si hemos sido educadas para pertenecer a las y los hijos, a un marido o compañero, para sostener a la familia a como de lugar, a ser abnegadas, sufridas y entregadas? ¿cuándo las estructuras nos han arraigado al ámbito privado? Precisamente el tema de la despenalización del aborto, nos acerca a un debate de tiempo atrás. En México se tutela la vida desde el momento de la concepción. Como siempre, es más importante el producto que la madre. Las legislaciones al respecto no tendría que tutelar únicamente el derecho a vivir que no está en discusión. La legislación tendría que contemplar un tiempo real para que las mujeres en caso de considerarlo necesario, se puedan practicar un aborto. Pero no, el Estado, las y los legisladores (en México sólo el 30% de los integrantes de la Cámara de Diputados son mujeres) son quienes deciden penalizar el aborto y con ello condenan a las mujeres a seguir sujetas de un régimen patriarcal. Nuestro cuerpo sigue colonizado, ya que no podemos elegir, qué hacer o que no hacer. El debate de que no debe ser una medida de anticoncepción es muy retrogrado, porque no siempre son efectivos los medios de anticoncepción y es una realidad. En México no todas las mujeres tienen acceso a ellos, no todas las mujeres tienen acceso a cursos de sexualidad, a programas de salud sexual y reproductiva. ¿Cómo vamos entonces las mujeres a tomar la vida pública si nuestra salud reproductiva, si nuestra sexualidad sigue siendo un tabú, si nuestro primer territorio que es nuestro cuerpo, aún no es libre y aún no lo gobernamos? Campañas como las que se han implementado en la región de América Latina sobre la despenalización del aborto 28 de septiembre, hacen visible la inquietud de muchas mujeres sobre el tema de ahí la importancia de estas manifestaciones, ya que están formando ciudadanía, las mujeres opinan y externan su sentir y eso ya es sacar a lo público lo que hemos tenido como privado.
¿Ustedes que opinan?
Soy Enma Obrador de la ASOCIACIÓN INTERNACIONAL DE MUJERES ABRAZANDO MÉXICO AMAM A.C.
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